ELBRUS
CORDILLERA DEL CÁUCASO (Elbrus 5.643 metros)
Periodo: del 1 al 12 de agosto de 2.006. Expedición individual.
Viaje preparado a toda prisa, me dan las vacacione en agosto y con escaso tiempo pillo esta aventura.
Salgo solo y en los aeropuertos de Madrid y Viena me voy encontrando al resto de los componentes del grupo.
Llegamos a Moscú avanzada la tarde, nos alojamos en el hotel y a buscamos restaurante para cenar, luego una visita rápida a plaza roja,
catedral de San Basilio, el metro y a dormir.
El siguiente día volamos a Meneraly Vody donde nos espera el guía. Nos traslada a Terskol, alojándonos en un hotel.
Comenzamos el trek aclimatación. Subimos por un valle hasta los 2.800 metros, pasando por una cascada de cola de caballo.
Siguiendo la aclimatación, al siguiente día, ascendemos al Pico Cheget de 3.400 metros. El descenso lo realizamos en el teleférico. En el
Restaurante de la estación de esquí comemos una sabrosa carne, regada con abundante cerveza.
Nuevo día, nos vamos hacia Azau, estación inferior de la telecabina. Tomamos este y un nuevo telesilla para llegar a el refugio Barrels (3.700 metros).
Nos acomodamos en este curioso refugio y hacemos una salida de aclimatación hasta el refugio Priut (4.000 metros)
En los días anteriores el tiempo ha estado espléndido, cambiando radicalmente hoy, lo cual me mosquea.
Día 06: Amanece encapotado, desayunamos y nos preparamos para otra salida sencilla de aclimatación hasta las rocas Pastuckhov (4.900 metros). Cogemos lo
imprescindible para un paseo. Son poco más de las 9 de la mañana y comenzamos a andar muy lentamente, yo me aburro, voy al final del grupo. Al
poco de sobrepasar el refugio Priut nos paramos para colocarnos los crampones, como todos van lentísimos, le digo al guía que me voy a adelantar.
Al cabo de media hora ya he perdido de vista a todo el mundo. Llego las rocas (12 horas) y trato de localizar con la mirada al resto de compañeros, no
los distingo en la lejanía y observo también que se empieza a despejar la cumbre, sobresaliendo de la niebla.
Ante la duda de cómo pueda seguir evolucionando la climatología, sin pensarlo dos veces, salgo disparado hacia la cumbre. Cerca
del collado empiezo a cruzarme con los que ya habían hecho cima, alcanzando a los más rezagados que continúan subiendo a ella.
A partir del collado comienza a soplar un fuerte viento, empiezo a sentir frío, voy con un pantalón de trekking y sin guantes. Menos mal que metí en
la mochila la parka de pluma.
El viento en la cumbre es más intenso (son las 15 horas). Tengo que hacer las fotos de la cima arrodillado, me congelo, así que nuevamente salgo corriendo ladera abajo. A las 16:40 estoy de vuelta en Barrels.
Sorprendí a todo el mundo por la rapidez que subí, especialmente a los vecinos japoneses, aunque al guía nuestro y los del resto
de grupos no les hizo gracia mi escapada. Más tarde lo celebraríamos con chorizo y unas cervezas.
Día 07: Les toca subir al resto del grupo, salen a las 02:00 horas, contratando una máquina pisa pista que les dejará cerca de las rocas Pastchukov. Es
la forma normal para la gente que asciende desde aquí, si no, se ha de subir desde el refugio Priut. Yo me paso el día descansando, sin hacer nada.
Como nos han sobrado días en la ascensión, contratamos un autobús y el guía nos lleva a visitar los valles de Oktoprack y Chequen,
yendo luego a comer carne a una grasería.
Día 10: Último día de estancia en la zona, hacemos un trekking por el valle de Terskol.
De vuelta a Moscú, el grupo se quedará unos días más, como ya lo conozco, me vuelvo solo a mi tierrina.
